Ocho tips para mejorar tu productividad en el trabajo

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El trabajo ocupa la mayor parte de nuestra vida y casi todo el día, pero a veces se convierte en una labor interminable que nos lleva a quedarnos horas extras para terminar las tareas pendientes. Aquí algunas claves para ser mucho más productivo y aprovechar mejor el tiempo.

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Ser proactivo
Este es el primer camino al éxito en el trabajo. Debes tomar tus propias decisiones y tener la iniciativa de desarrollar acciones o ideas creativas, teniendo en cuenta cómo y en qué momento las vas a realizar.

Concéntrate al máximo
Si estás desconcentrado, no puedes decidir bien y eso afecta en tu productividad. Debes dejar de hacer o pensar en cosas que te generen estrés o tensión para recién empezar una tarea, a la cual tienes que enfocarte y ponerle un tiempo en el que piensas terminar, así te organizas mejor.

Marca objetivos y no tiempos
La productividad no se define por horas trabajadas sino por los objetivos logrados. Por eso, no te pongas una cantidad de horas para saber si eres efectivo o no, sino plantéate metas que te hagan sentir bien con tu entorno laboral y que te comprometan con la empresa en la que trabajes.

Aprovecha la energía al máximo
Identifica en qué parte del día tienes mucha energía y aprovéchala en las tareas más importantes o complicadas. Algunos las tienen por las mañanas y otros por las tardes, todo será cuestión conocerse a uno mismo.
Pero, recuerda, siempre debes tomarte pequeños descansos entre tus labores para desconectarte y relajarte un poco para retomar con las mismas fuerzas con las que empezaste.

Crea sinergias
Te puedes concentrar, pero no aislar, por ellos uno de los mejores trucos para la productividad laboral es unir fuerzas con los compañeros de trabajo con el objetivo de terminar una tarea.

Evita perder el tiempo
Este es otro punto importante para rendir más en el trabajo. Tienes que evitar distraerte o darle mucha prioridad a cosas que no son importantes en ese momento, como por ejemplo las llamadas, internet, visitas inesperadas, whatsapp, redes sociales, entre otros.

Despójate del estrés
El estrés se vuelve un problema aún más complicado cuando nos lo guardamos para nosotros solos. Tienes que sacarlo y comentarle tu situación a un compañero de trabajo, por ejemplo, y así te ayudas a relativizar lo que te angustia. Eso ayuda mucho a mejorar tu calidad laboral.

Pasión por tu trabajo
Es importante recordarla y sacarla a flote porque por más que parezca obvia, la clave para la productividad es la motivación a la hora de realizar nuestra labor profesional y para ello debe haber pasión por lo que hacemos.
Si laboras en algo que no te gusta, tu calidad de trabajo puede disminuir muchísimo.

 

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