¿Estás sobrecalificado para ese trabajo?

4057

 “Lo siento, usted no cumple con el perfil del cargo. Está sobrecalificado”, es una frase que a menudo reciben como respuesta los postulantes a una oferta de trabajo. Por lo mismo, tanto título en el currículum, más que ofrecer una buena oportunidad cuando se busca trabajo, en ocasiones cierra puertas. Por algo la cesantía ilustrada, como se ha llamado a los profesionales o técnicos con varios cartones bajo el brazo que no pueden encontrar empleo, se ha transformado en un tema recurrente de conversación.

sobrecalificado

¿Que hay detrás de todo esto? Aquí es necesario separar los casos, porque mientras existe un grupo de profesionales que se resiste a “rebajarse” y tomar un cargo de menor envergadura, por otro lado están las empresas que evitan contratarlos porque temen que el sobrecalificado se vaya en cuanto encuentre un cargo que le acomode. Por eso, a la hora de postular a algún trabajo debes tener cuidado de no adornar mucho tu hoja de vida.

Ernesto Velarde, country manager de Trabajando.com Perú señala que “en algunas oportunidades contar con un currículum más abultado, con muchos títulos y especializaciones, más varios años de experiencia, puede dificultar aún más la búsqueda de trabajo, ya que la pirámide se va achicando cuando las expectativas laborales son mayores y por ende, la competencia es más agresiva”.

Velarde agrega que “cuando las economías se recienten existen menos ofertas de trabajo y es más común encontrarse con personas muy bien preparadas sin trabajo. Por lo mismo, puede ser una buena oportunidad para las empresas contratar colaboradores sobrecalificados que le pueden entregar un mayor valor, siempre que sean capaces de sacar lo mejor de cada uno de ellos. Deben saber administrar bien sus competencias y conocimientos, y en la medida de lo posible, potenciarlos si los resultados los validan”.

Los jefes no deben atemorizarse ante la presencia de un subalterno con mucha especialización ni mucho menos verlo como una amenaza, creyendo que en un futuro le puede quitar el puesto. Sino que todo lo contrario, deben ser capaces de aprovechar al máximo ese potencial en beneficio de la empresa y de lograr mejores resultados.

Además, la sobrecalificación dura poco. Sobre todo en los tiempos de hoy, donde el mundo avanza tan rápido. Será, entonces, responsabilidad de cada uno estar actualizándose constantemente, de lo contrario, en cualquier momento su condición cambiará y se convertirá en un subcalificado.

¿Cómo detectar una persona que está sobrecalificado para su cargo?
Expertos mencionan algunos aspectos que los jefes deben tener en cuenta para poder evidenciar esta situación en algún miembro del equipo de trabajo y cómo explotar su potencial.

  1. Aburrimiento. Este es el primer indicador, que una persona es muy inteligente para su trabajo. Si un colaborador se muestra decepcionado por los proyectos desarrollados, se le dificulta concentrarse y pierde el foco de sus responsabilidades, es posible que esté en el “puesto equivocado”. Asignarle proyectos desafiantes servirá para aprovechar su potencial.
  1. Caja de ideas. El trabajo debe proporcionar una oportunidad para intercambiar ideas y darles forma a las mismas, por lo tanto, es una mala señal si esta situación no se presenta o si el colaborador siente que sus propuestas no van a ninguna parte. Generar espacios donde se pueda aprovechar su capacidad intelectual resultará clave.
  1. El jefe no lo valora. Si el trabajador no encuentra en el jefe a un líder que valore su trabajo o siente que no tiene que aprender de él, puede sentir que su carrera se frena. Dirigir este talento hacia proyectos ambiciosos genera un gana-gana.
  1. No se confunda. Es distinto un colaborador sobrecalificado a uno con gran potencial. Este último tiene la oportunidad de desarrollar sus capacidades a niveles superiores y la posibilidad de ocupar cargos con mayores responsabilidades. El reto de la gestión del talento es lograr tener a la gente correcta en el puesto adecuado en el momento correcto.
  1. Mejore el análisis. En muchos casos las empresas contratan personas sobre o subvaloradas para un cargo sin hacer un análisis de las consecuencias que ello implica. Un profesional subvalorado no estará motivado para desempeñar su cargo eficientemente, y uno sobrevalorado no tendrá las calificaciones requeridas.
Comentarios