Si bien los estudios en el campo laboral verificaron que el buen humor eleva la sociabilidad, la generosidad y la creatividad como cita la publicación “Business Harvard Review” también descubrieron que este continuo estado puede volver a las personas menos cuidadosas y más crédulas.
Por ello, indican, es necesario un contrapeso de emociones negativas, ira y vergüenza, por citar algunas dentro del trabajo, para que los colaboradores presten mayor atención a sus errores, por ejemplo, y se corrijan, a fin de asegurar el éxito de la organización.
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