Salario emocional, indispensable complemento del salario nominal

2234

Por Jesús E. Maza – Especialista en Management y Desarrollo Organizacional

En un artículo : Cómo organizar un After Office, la autora Julia Lucia nos cuenta que “El After Office es una costumbre que en Europa tiene cientos de años, pero en Latinoamérica se realiza hace relativamente poco. El After Office suele ser un día de semana y la idea es juntarse a tomar y divertirse con los compañeros de la oficina.” 

Igualmente, wikipedia define “La hora feliz, también conocida por la expresión inglesa happy hour, es una estrategia de márketing por parte de algunos bares, pubs y discotecas de varios países del mundo, en el que se ofrecen bebidas durante momentos concretos a un precio más barato”

El factor común de este caso, es que ambas costumbres se han arraigado en nuestra cultura latina y, apartando el lado comercial, su intención es ofrecer un ambiente y un momento relajado donde todos podamos liberar las tensiones del día. Momento en el cual además, podamos compartir en un ambiente distendido con compañeros de trabajo, amigos, clientes, proveedores y asociados.

Pero, la cuestión es: ¿Por qué el Happy Hour es casi siempre en el After OfficeY no en el horario de trabajo, dentro de la oficina, dentro de la empresa u organización?

No pretendo promover el consumo de alcohol en la jornada laboral, pretendo llamar la atención sobre lo que conocemos actualmente como salario emocional y sus múltiples estrategias las cuales están orientadas a fidelizar al talento.

Todo cambia. En el caso del ámbito laboral, uno de esos cambios es el impulso de las nuevas generaciones de trabajadores hacia una nueva forma de valorar las compensaciones que un empleo les puede aportar.

Como directivos y líderes, es nuestro reto y responsabilidad diseñar un ambiente organizacional que pueda proporcionar a nuestros colaboradores muchas Happy Hour dentro de su jornada habitual de trabajo. 

Un ambiente que, por diseño les permita relajarse y tener el tiempo para poder bajar las tensiones diarias, refrescarse y “cargar baterías”. No estoy haciendo referencia al diseño del mobiliario (que es importante), me refiero a propiciar, por ejemplo; encuentros, actividades, reuniones, etc. y cuyo objetivo en sí mismo no tengan nada que ver con las tareas rutinarias. 

Los Works Survey o encuentas orientadas a medir el clima organizacional, indican en sus resultados que el 94% de sus empleados no cambiarían de empleo debido a la atmósfera o ambiente laboral que tiene la empresa donde actualmente laboran. 

Ese es el perfecto indicador para que podamos ver el resultado intangible que proviene de invertir tiempo en mejorar la calidad de vida en la jornada laboral.

Y, viene entonces la pregunta de muchos: ¿de dónde sacamos tiempo para nuestros Happy Hour en la oficina? La respuesta es simple, aunque no así el proceso:  Cuando combinamos estrategias de optimización del tiempo, reingeniería de procesos y mejora en los tipo y la calidad de la comunicación, veremos que tendremos tiempo de sobra para nuestros Happy Hour.

Todo lo que inviertas en salario emocional será ampliamente retribuido con incrementos de la productividad y fidelización de tus mejores talentos.

 

Comentarios