Gerentes, Jefes, Supervisores: ¿Están motivando a su personal?

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Por Víctor Vich Rodríguez (Perú), Pionero de la Motivación y Desarrollo Humano en el Perú, victorvich.motivacion@gmail.com, motivacionempresarial.net

La motivación es la fuerza psíquica que impulsa a mover, a hacer algo; es aquella que genera el deseo, que da o plantea motivos para que la persona actúe ya sea haciendo, o por omisión.

Jhon Adair afirma que un 50% del logro alcanzado por una persona se debe a sí misma, y el otro 50% al medio ambiente. En lo personal, me inclino más bien hacia un 80/20, y actualmente se viene hablando de un 90/10, según  Stephen Covey.

Los conductores de grupos humanos (gerentes, jefes y supervisores), deben ser grandes motivadores, en otras palabras, inspiradores ejemplares y suficientemente persuasivos para el logro de objetivos personales y empresariales, mas no por manipuleo emocional -algo nada ético y educativo – sino por razonamiento y convicción, pues existen buenas razones para ello.

La responsabilidad del líder moderno y humanista es tremenda en cuanto a su rol motivante se refiere.   Es al líder al que le toca infundir y crear el adecuado espíritu de lucha que se requiere para el logro.

Creo que el axioma vendedor “tenemos que estar convencidos para convencer” encaja perfectamente. La  motivación es la gran fuente del logro, por lo cual un líder realmente motivado será capaz de motivar al grupo que conduce. No hay otra manera. Recordemos que el entusiasmo promueve entusiasmo así como la apatía genera tibieza. Tengamos presente que la influencia motivadora puede ser positiva o negativa ¡Motivación al fin!. Pero la positiva es saludable y constructiva, mientras que la negativa, no.

El maestro Abraham Maslow dice: Es propio de los seres humanos estar deseando siempre algo a lo largo de su vida. El hombre es un SER  necesitado y raramente alcanza un estado de completa satisfacción, excepto en breves espacios de tiempo. De allí que seguimos pensando en la trascendencia de ese gran resorte impulsor que es la constructiva motivación constante, pues los estados satisfactorios promueven nuevas satisfacciones y estimulan el ego en positivo, la autoestima, la responsabilidad, el impulso que construye.

La recomendación general y específica, apreciado líder, está relacionada motivacionalmente a una condición fundamental, y ésta es que a la persona básicamente le guste hacerlo, o enseñarle a que le guste con tu poder seductor. Un proverbio japonés lo señala así: “Ningún hombre encontrará la mejor manera de hacer una cosa, si no le gusta hacerla”.

Cuando somos suficientemente claros, la fuerza motivante se refuerza. Hagamos de la comunicación motivante nuestra herramienta favorita, la magia de su poder es inconmensurable y recordemos lo que puntualmente nos señala el diccionario. Motivación: Acción y efecto de motivar, ensayo mental preparatorio de una acción para animar o animarse a ejecutarla con interés y diligencia.

Por eso, todo lo que sea progreso, avance, es motivante, y como el ambiente juega un papel importante, señores líderes: ¡Creen un ambiente emotivo, subyugante!… e impriman en la mente y en los corazones de su personal, ese hermoso pronunciamiento que tanto nos enseña al decirnos: “No es hacer lo que gustamos, sino gustar de lo que hacemos, lo que hará de nuestra vida una bendición”.

Permítanme marcar enfáticamente entonces: MOTIVAR ES ESTIMULAR y un personal en estas condiciones, es un personal exitoso que genera una empresa exitosa.

 

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